Los guionistas de cine y animación, específicamente de anime, buscan incorporar escenarios con una arquitectura diversa como dispositivo que les ayude a contar sus historias. Sus influencias van desde los pueblos medievales hasta las metrópolis futuristas. La arquitectura como campo de conocimiento abarca una amplia gama de elementos a estudiar, cada período de la arquitectura comunica y mejora su contexto histórico a través de su diseño. Sin embargo, en el cine y el anime, todos los contextos detrás del diseño de un edificio se pueden condensar en un solo 'cuadro', lo suficientemente poderoso como para contar miles de historias.
Hayao Miyazaki, uno de los más grandes cineastas, autores y artistas de Japón, cofundador de Studio Ghibli, ha inspirado a toda una generación, narrando la evolución de la sociedad japonesa dentro de la animación, con énfasis en dos temas principales: el urbanismo y la naturaleza. La complejidad de la mente de Miyazaki se refleja en sus películas, un medio que utilizó para exponer lo insignificantes y pequeños que somos como seres humanos en comparación con la grandeza de la naturaleza que nos rodea.
Studio Ghibli fue fundado en Tokio, en 1985, para producir películas con narrativas que tuvieran como temas el pacifismo y la ecología, y también para explorar las particularidades de la mitología japonesa y las leyendas urbanas. La arquitectura utilizada por Miyazaki en sus películas remite a su visión del mundo moderno, cada vez más afectado por la tecnología y un continuo alejamiento del entorno natural.
Miyazaki sitúa sus narraciones en contextos naturales y construidos caracterizados por una impresionante riqueza gráfica, complejidad de texturas y una atención escrupulosa a los detalles más pequeños. El estudio basa sus ideas en cosas y entornos reales, pero con una apariencia de fantasía. Vigas y pilares unen fantasía y realidad, haciendo que los detalles estructurales sean muy precisos y de gran valor artístico y sentimental. – Dani Cavalaro
Al ver sus películas, queda claro cómo Miyazaki ve la naturaleza y el hombre como uno solo, ya que su visión de la arquitectura está fuertemente influenciada por sus viajes por el mundo, así como por su deseo de explorar los temas de la tecnología y la destrucción. Las películas de Miyazaki sobresalen por el dominio de la técnica que, a través de la riqueza de detalles presentes en cada escena, invita al espectador a formar parte de la realidad de estos mundos ya sentirse dentro de ellos.
Las animaciones de Miyazaki son radicales en su repudio a la tecnología, en una era de avance desenfrenado. Desde "Mi amigo Totoro" (Mi vecino Totoro, 1988), con su noble visión de la amistad entre dos niños y una enorme criatura del bosque que solo ellos pueden ver, hasta la fábula onírica "El viaje de Chihiro" (El viaje de Chihiro, 2001), en la que una niña tímida debe reunir el coraje para salvar a sus padres trabajando en una casa de baños que atiende a una variedad de dioses extravagantes, hasta "El castillo ambulante de Howl" (2004), en el que una bruja odiosa maldice a una niña con un cuerpo envejecido y su única oportunidad de romper el hechizo es un joven hechicero en un castillo ambulante, Miyazaki expresa los límites más salvajes de la imaginación.
Miyazaki intenta reflejar los personajes, temas y lugares que cínicamente construye y crea, en la destrucción del medio ambiente, los horrores del agua, la pérdida de la inocencia y el cultivo de los valores de lealtad, gratitud, coraje, sacrificio y amor. Muchos de estos temas son evidentes en El castillo ambulante de Howl (2004), una animación que es una mezcla perfecta de representación estética steampunk, caprichosa y brumosa, con una trama que gira en torno al amor, la lealtad, acompañada de un contexto secundario de guerra. Colmar, Francia, es el escenario principal de la película, que representa un híbrido de arquitectura alemana y francesa mejor reconocido por sus calles empedradas, escaparates, callejones y paisajes sorprendentes.
La arquitectura dentro de las obras de Miyazaki no es un tema secundario a la narrativa, sino una parte integral de la misma. A medida que las películas de Studio Ghibli adquieren cada vez más influencias occidentales, su desafío es preservar y reinterpretar las concepciones japonesas tradicionales en nuevas trayectorias. Las películas de Miyazaki han estado profundamente arraigadas durante mucho tiempo en la identidad nacional de Japón, tocando profundamente los corazones de las personas y capturando la imaginación de fanáticos de varias generaciones en todo el país y el mundo.
Este artículo es parte de los temas de ArchDaily: El futuro de la visualización en arquitectura. Presentado con orgullo por Enscape, el complemento de renderizado en tiempo real y realidad virtual más intuitivo para Revit, SketchUp, Rhino, Archicad y Vectorworks. Enscape se conecta directamente a su software de modelado y ofrece visualización y flujo de trabajo integrados.
Cada mes exploramos un tema en profundidad a través de artículos, entrevistas, noticias y obras. Conoce más sobre nuestros temas. Y como siempre, en ArchDaily valoramos las contribuciones de nuestros lectores. Si quieres postular un artículo o una obra, contáctanos.